22 agosto 2009

Hermosas palabras de Max

Con motivo de la convocatoria al 10º Encuentro de Historietistas en San Nicolás Aquelarre, el amigazo Max Aguirre nos contestó con unas palabras que nos conmovieron mucho. Sin su permiso las reproducimos para todos, ya que son un buen resumen de nuestra historia y de nuestros sentimientos.
¡Muchísimas gracias Max por tus palabras!

...yo siento otra vez que ustedes, Los Aquelarre, vuelven a hacer el movimiento simbólico que explica y pone en acto el momento histórico de la historieta independiente. Siempre lo sentí así, desde que los conocí, me acuerdo que una de las charlas que tuvimos en el primer Aquelarre que fui, ustedes estaban intrigados por mis microrevistitas color y yo hablaba de que no me importaba vender con mínimo margen ni bajar costos imprimiendo mucho, que hacía tiraditas chiquitas porque consideraba que era al pedo imprimir mucho salvo que uno supiera que era probable vender, pero que me importaba despegarme estéticamente de los fanzines y ustedes cuando los volví a ver estaban con Jaime Pop con tapa color y un nicho de mercado real en escuelas en donde daban talleres y con el Bloc del pollos y tus Historias cortas y bellas con un diseño más de Papelera Palermo que de la AHI y yo dije "La mierda estos pibes como tienen cintura y lucidez" más adelante los ví progresando en ese camino y de golpe en Campana me los encuentro y estaban otra vez rumiando, sintiendo que había que desmarcarse, que ya no estaban para el stand al lado de los pibitos fanzineros, ahora analizando las editoriales como Domus y el proyecto Belerofonte que empezaba a repuntar con distribución de Accorsi y un tiempito después se descuelgan con Loco Rabia, haciendo un Sello Editor que entre otros artistas publica historietas del grupo, y lo hacen con uno de los tipos más expeditivos, lúcidos y talentosos de la "indie", Ale, obvio y para el primer libro deciden hacer un compilado de todos los que fueron del circo independiente, una foto final, un cierre editorial de lujo. Siguen adelante y rápidos de reflejos, asumen editar un proyecto que les deja plata y no les saca un mango, como Aquí Mismo y de trasca se asocian con otro de los que saben ver la Matrix, si si, El Mariscal Santullo y enrolan entre otros al más rutilante guionista del momento para editarle El Campito (genialidad tras genialidad de ustedes) por otro lado consiguen distribución nacional y si algún distraído pensó que tanto esfuerzo logístico los iba a opacar como autores, se equivocó, porque las tiras esas larguísimas del trastorno de Caio son LA VANGUARDIA MISMA, Baert es un autor (a mi entender) a la altura de Trondhein que pulió su estilo gráfico y selló con clase su ya conocido toque narrativo y Marquitos se está volviendo uno de los más personales y sólidos dibujantes de la escena nacional y no lo digo yo ¡Ojo! la prueba está en que son las estrellas actuales de HR y del Circo, los que más público tienen y reciben aplausos de colegas, crítica y público ¡Chapeau!
Y por qué les digo todo ésto... porque sí, porque hay que decir las cosas ¿y porqué lo de los abrazos? porque otra vez como les decía al principio, vuelven a poner en acto lo que vuela en ciernes, yo sé, yo intuía que este es el último Aquelarre y es el cierre, la clausura casi definitiva de un ciclo que va más allá del evento nicoleño, es poner sobre la mesa un secreto a voces: Se terminó la ruta que arrancó a finales de los noventas, somos todos veteranos, varios padres de familia y hay que dar un paso (algunos al costado) otros para adelante, conmovedor y emocionante, pero necesario, en el último Tintanakuy, en las charlas de la Feria del Libro y Viñetas Sueltas, en las reuniones informales que suelo tener con los veteranos y los pibes se demuestra eso cuando pasan dos cosas, una, que ese espacio que yo decía que, o nos lo daban o se lo debíamos arrancar a los viejos de una vez, por el bien de todos, ese espacio nos lo han dado, nos reconocen y la otra, los pibes arrancan a tratarnos como nosotros los tratábamos a ellos, ya no somos pares, ya no somos pibes "Demasiado jóvenes para morir, demasiado viejos para el rock" diría Fredy. Al final está pasando, ahora la antorcha nos la dieron, listo, suerte che, es lo que hay y somos parte del nuevo stablishment, si no me creen busquen en los medios que atienden a la historieta y verán que de una u otra manera nos nombran, más menos, pero somos parte del asunto sin dudas ¡Felicitaciones!
Me conmovió mucho saber que se va a ir Aquelarre, me admira el radar con que logran el movimiento certero siempre, me llena de alegría que sean mis amigos y por eso propongo que nos dediquemos a abrazarnos y tomar birra, es el último tema, bailemos a full que después no hay más. Para bien, pero se acabó.
Abrazo grande.
Max

2 comentarios:

Rogelio Ferreyra dijo...

Hermoso texto, realmente. Muy propio de él.

¿Cómo que se va Aquelarre?

Marcos dijo...

Sí, este año es el último Aquelarre que hacemos, es la despedida, chau, chau adiós... Así que Rogelio, te recomiendo que vengas!!!